La tos, en la mayoría de los casos, es un reflejo involuntario y un síntoma de un resfriado. Se produce cuando un estímulo diferente, ya sea inflamatorio, térmico, químico o mecánico, actúa sobre muchos receptores situados a lo largo de nuestras vías respiratorias (excepto en los bronquiolos y alvéolos).
De esta forma, la tos cumple la función fisiológica de eliminar secreciones o agentes irritantes de las vías respiratorias.
Aunque en la mayoría de los casos la tos no es grave, en ocasiones puede indicar una enfermedad importante y que tiene varios causales como se detallarán a continuación:
- Tos inflamatoria: las vías respiratorias se hinchan, lo que dificulta el paso del aire y la tos puede causar dolor.
- Tos por contaminación o alergia: en muchos casos, este tipo de tos es síntoma de una alergia permanente o estacional o de la exposición a zonas muy contaminadas.
- Tos por factores externos: los cambios bruscos de temperatura también pueden provocarla, así como factores emocionales provocados por la ansiedad, el nerviosismo o los tics, como la tos psicógena.
- Tos por tabaquismo: fumar (incluido el humo de segunda mano pasivo) y el uso de drogas contribuyen a la aparición de una tos que puede volverse crónica.
¿Cómo aliviar la tos?
Hay que tener en cuenta la facilidad de deglución para no afectar más a nuestro organismo ni vías respiratorias, por lo que las cápsulas softgel con efecto mucolítico y expectorante son ideales para luchar con la eliminación de la tos, ya que son fáciles de transportar y completan el tratamiento para combatirla de una manera eficaz.
Una cápsula de Broncotosil cada 8 horas por 5 días y dile adiós a la molesta tos.
Referencias:
Goiuri Uribe, I. (2016, 15 enero). Tos: tipologías y tratamiento. El Farmacéutico. https://www.elfarmaceutico.es/uploads/s1/14/87/ef530-curso.pdf